La muerte súbita en deportistas es una realidad que se presenta en personas supuestamente sanas, durante el transcurso del deporte o hasta una hora después de finalizada la práctica. La incidencia de la muerte súbita es relativamente baja, pero su repercusión en familiares y personas cercanas es de impacto. ¿Se puede prevenir la muerte súbita? ¿Es necesario tomar mayor conciencia para tener en cuenta los riesgos de los deportistas?

Por Cristina Cartier
“Es una temática que surge y nos obliga a considerar. Muchas de las consultas rondan el tema, lo cual infiere cierta preocupación por parte de la población. La muerte súbita es parte de nuestra realidad por lo cual se debe hacer la prevención correspondiente”, explica el médico cardiólogo Dr. Iván Gómez para INS.
¿Qué es la muerte súbita?
“Es cuando ocurre de manera repentina. El desenlace termina con la vida de una persona en menos de una hora desde que comienzan los síntomas, en una persona que previamente no se conocía enferma. Por eso decimos que la muerte súbita es algo inesperado en una persona que no presentaba ninguna enfermedad subyacente”.
¿Qué tipo de enfermedades se vinculan con la muerte súbita?
“Se abre un abanico muy importante de causas de la muerte súbita. Se diferencia por edad, ya que existe una especia de división, menores de 35 años de edad, y mayores de esa franja. Por debajo de los 35 años hablamos de enfermedades congénitas que se manifiestan de manera tardía, o alteraciones de índoles estructurales del corazón, como son algunos tipos de arritmias de causas genéticas”.
¿Qué ocurre antes de la muerte súbita?
“Hay pocos síntomas. Son bastante abruptos, como la pérdida de la conciencia, puede haber dolor de pecho o una diaforesis, es decir una falta de aire aguda, que el paciente manifiesta de manera repentina. La clave está en la pérdida de conocimiento que sufre la persona. Puede haber algunos movimientos propios de la actividad neuronal persistente, como movimientos tónicos o aquel síntoma que las personas confunden con convulsiones. En este contexto no es fácil diferenciar, por eso es fundamental saber que se trata de una persona que repentinamente cae al suelo, y que no responde ante el llamado de las personas a su alrededor porque se encuentra en coma”.
¿Cómo es ese término de minutos previos a la caída?
“La persona puede llegar a decir alguna palabra o expresar un quejido a causa del dolor, e incluso tomarse el pecho como señal de lo que está sintiendo. No hay una sintomatología florida previa, por eso es una muerte súbita. Cuando hablamos del tiempo previo, que es de aproximadamente una hora antes, desde que ocurre ese evento hasta que se produce el fallecimiento, es el lapso de tiempo que define la muerte súbita, ya que existen otras causas como el ACV , que tiene una manifestación similar, pero que posteriormente se define como un cuadro neurológico”.
¿Cuáles son las causas de la muerte súbita?
“Lo primero es entender que probablemente el paciente tuviera alguna enfermedad sin conocer. Puede tratarse de la enfermedad coronaria que aparezca sin previos síntomas. En este caso lo que desencadena el evento es la propia actividad física. Hay que tener en cuenta que una exigencia, o una actividad física vigorosa, genera en el cuerpo una reacción de taquicardia, de elevación arterial, de aumento de catecolomina (adrenalina) circulando en sangre, lo cual genera un terreno propicio para las arritmias ventriculares, que es lo que termina produciéndose en el corazón. A este cuadro se lo denomina arritmia mortal”.
¿Es lo que se denomina “la paradoja del deporte”?
“Exactamente. Así lo expresan los libros. Sabemos que el deporte es unos principales determinantes de la salud de las personas. Quien practica actividad física siempre tendrá una mejor calidad de vida y sobrevida. Pero en este contexto, sabemos que cercano al evento de exigencia máxima, el terreno es propicio para la generación de arritmias. El corazón se encuentra sobreestimulado frente al esfuerzo físico, por lo cual si esa persona no estaba al tanto de alguna patología, puede ocurrir la muerte súbita”.
¿Cuál es el concepto del mundo deportivo frente a las eventualidades?
“Es fundamental la pregunta porque sabemos que existen patologías que se pueden diagnosticar previamente con determinados estudios, pero hay otras que no se pueden determinar con anticipación. Ante lo cual se debe tener armado un sistema de atención para deportistas que presenten muerte súbita o repentina. La realidad es que los efectores de salud deberían participar activamente de generar conciencia en este aspecto. Si bien es una patología difícil de revertir, tiene solución. Existe la posibilidad de practicar la técnica de RCP a la persona afectada, y de efectuar un choque eléctrico con un desfibrilador, que es un aparato que está preparado para eso, y que debería estar presente en todo lugar con alta concurrencia de personas, o en espacios deportivos. Si esto se implementa de manera pronta, las chances de sobrevivir de esa persona son altísimas. Es decir que teniendo en cuenta esta atención de emergencia, se puede salvar la vida de una persona. Hay registro de altos deportistas que han atravesado este tipo de eventos cardiológicos, que han sido recuperados con RCP, y que han vuelto a la actividad de alto rendimiento como si nada hubiera ocurrido”.
¿Cuánta conciencia existe en relación a que personas comunes aprendan la técnica de RCP?
“Consideramos que es una herramienta bastante difundida, que cualquier persona puede acceder a aprenderla, y refrescar conocimientos cada tanto. No existe legislación clara con respecto al tema, depende mucho de las instituciones deportivas u organismos organizadores, pero hace falta unificar criterios jurídicos y decisiones políticas en cuanto a la obligatoriedad de la enseñanza de cursos de reanimación cardiopulmonar. Se debe capacitar a deportistas y referentes, como para garantizar una atención inmediata ante posibles eventos de este tipo”.