Intoxicación por monóxido de carbono: ”El asesino silencioso”

El monóxido de carbono causa 200 muertes al año en Argentina. “Lo principal para evitarlo es la prevención. Siempre hay que mantener los ambientes ventilados y verificar el correcto funcionamiento de calefactores, estufas, calefones, etc. “, según advierte la Asociación Argentina de Medicina Respiratoria (AAMR).

Los especialistas definen a la intoxicación por monóxido de carbono como el “asesino silencioso” porque no tiene olor, color y es difícil de percibir, cuando esto ocurre, generalmente ese individuo ya se encuentra intoxicado. Quizá la principal señal que pueda advertirse, es cuando la persona expresa sensación de embotamiento, o incluso en etapas más avanzadas del proceso, el paciente se queda dormido y hasta puede morir. El Dr. Ramiro Heredia (MN 117.882) del Hospital de Clínicas, detalla para INS aspectos generales de la intoxicación de la cual se reportan 40.000 casos por año en nuestro país.

¿Qué es el monóxido de carbono?

“Es un gas que no tiene color, olor, ni sabor y no es irritante, motivo por el cual se lo denomina “el asesino silencioso”. Es producto de la combustión que se quema y suele concentrarse en lugares mal ventilados. Se trata de algo sumamente tóxico para los seres vivos. Este gas llega a los pulmones, pasa a través de las membranas a la hemoglobina, que es la principal proteína en la sangre, encargada de transportar el oxigeno hasta los órganos. Rápidamente el monóxido ocupa el lugar del oxígeno y se advierte su faltante en el organismo. No solo genera intoxicación aguda con riesgo de vida, sino que se presenta un porcentaje muy alto de pacientes que quedan con secuelas neurológicas, durante varios meses o incluso durante toda su vida”.

¿Por qué razón son tan frecuentes este tipo de intoxicaciones?

“El problema del monóxido de carbono es que en un 80% depende de dos factores. Uno es que seguramente existe algún artefacto a gas que no está funcionando adecuadamente. En segundo lugar que seguramente no existe una ventilación adecuada. Esta es una combinación recurrente en relación a los casos que habitualmente se presentan. Cualquier artefacto a gas debe ser revisado cada año por un profesional matriculado, según la recomendación del Ministerio de Salud de la Nación. Es fundamental chequear que los conductos de ventilación del aparato no estén tapados, que la salida esté en condiciones, que la llama se muestre siempre azul, asegurarse que existan rejillas de ventilación en el ambiente, no colocar calefones en lugares donde no existe ventilación adecuada, etc.”.

¿Cuáles son los principales síntomas?

“No hay síntomas específicos por intoxicación de monóxido de carbono. Muchas veces llegan al servicio de emergencias una familia completa con vómitos, dolor de cabeza, que incluso, pueden confundirse con intoxicaciones alimentarias o un cuadro viral cualquiera. Habitualmente se trata de manifiestos que se presentan entre convivientes. Por lo general, se trata de síntomas muy inespecíficos, que incluyen mareos, sensación de cansancio, que las personas no pueden explicar claramente. Generalmente suelen mostrarse somnolientos incluso con pérdida de conciencia o presentar convulsiones en cuadros más graves, que incluso pueden terminar en un paro respiratorio y hasta la muerte de la persona”.

¿Qué es lo primero que debe hacerse frente a una intoxicación por monóxido?

“Debemos identificar la situación y lo primero es ventilar el lugar, cerrar la llave de paso de gas y no volver a encenderla hasta reconocer el problema técnico, al tiempo que se deben retirar a las personas o mascotas, que también sufren estas consecuencias, y llamar al servicio de emergencias. Cuando pensamos que se trata de una persona con exposición al monóxido de carbono debe ser evaluada por los médicos lo más rápidamente posible, ya que esa victima debe recibir oxigeno, y hasta se puede requerir una terapia especial para su recuperación. Esto es fundamental para obtener la menor cantidad de complicaciones posibles, y menor riesgo de secuelas a largo plazo, a causa de este tipo de intoxicación”.

¿Cuáles son los principales descuidos de las personas que sufren episodios con monóxido de carbono?

“Gran parte de las intoxicaciones ocurren de noche. Las personas no apagan las estufas al dormir y es cuando no se advierten los síntomas, entonces el paciente lamentablemente se muere”.

¿Qué pasa cuando nos dicen que el calefactor cuenta con válvula de seguridad? ¿Se trata de una estrategia efectiva?

“Puede pasar una intoxicación en un domicilio provocado por el gas, porque se apagó la llama y el gas siguió saliendo. También puede ocurrir cuando la llama está prendida y la combustión es inadecuada. La llama siempre debe ser uniforme y azul. Si es de color amarillo o naranja o irregular, debemos hacerla revisar por un gasista”.

¿Puede pasar que arda la vista ante la presencia de monóxido?

“Justamente el monóxido de carbono no es irritante. Probablemente en esos casos existan otros gases o combustibles (querosén) en el ambiente, que causan esa molestia en la vista”.

¿Se hace fácilmente el diagnostico de dicha intoxicación?

“Está muy subdiagnosticado. Muchas veces se trata de síntomas vagos, como un simple dolor de cabeza, o una pequeña molestia, y la persona verdaderamente está recibiendo monóxido de carbono. Por eso siempre este tipo de situaciones son detectadas cuando son intoxicaciones moderadas o graves. Este último caso infiere personas que se muestran muy somnolientas o dormidas, que presentan determinada complicación como dolor de pecho o directamente hacen un infarto de miocardio, puede conllevar disfunción respiratorias y hasta convulsiones”.

¿Cuál es la población de mayor riesgo frente a una intoxicación de esta índole?

“Los grupos con mayor predisponían a una intoxicación por monóxido de carbono son los niños, los ancianos, las embarazadas, los pacientes con enfermedades cardiacas crónicas o pulmonares, los fumadores  y las personas que viven en altura, que están acostumbradas a manejar menor cantidad de oxigeno, y por tanto cuentan con menos resto como para defenderse de una posible intoxicación”.

En relación a los pacientes que llegan a la guardia con un estadío avanzado de intoxicación, ¿En cuánto tiempo se recuperan?

“La exposición con monóxido de carbono no es en segundos. Para que una persona se intoxique se requiere un lapso de algunas horas frente al monóxido de carbono. Cuando el paciente llega a la emergencia, lo primero que se hace es confirmar los síntomas, se le coloca oxigeno inmediatamente para recuperar su capacidad respiratoria y despejar la presencia de monóxido de carbono en su interior. Lo más habitual es que ese paciente se recupere con el correr de algunas horas. Se le infiere un control que consiste en la extracción de sangre para observar los niveles de hemoglobina. Luego de eso el paciente regresa a su casa siempre con un seguimiento médico y considerando las condiciones del lugar donde ocurrió la intoxicación”.

¿Por qué es importante dicho seguimiento?

“Sabemos que hasta un 40% de los pacientes desarrollan un síndrome neurológico que se denomina síndrome neuropsiquiátrico retardado. Consiste en que las personas expuestas al monóxido de carbono, con un cuadro grave, al transcurrir varios meses del episodio, empiezan a expresar síntomas cognitivos, es decir déficit de atención, trastornos de conducta, de movimiento, etc. Síntomas que pueden persistir mas de un año de la intoxicación aguda, porque el cerebro sufrió, en determinadas aéreas, falta de oxigeno. Por lo general se trata de síntomas muy sutiles, por eso es tan importante el seguimiento médico luego de la intoxicación”.