La función de bombeo del corazón se debilita y hace que el suministro de oxigeno a órganos importantes como el cerebro, los riñones y los músculos, disminuya. Las señales de advertencia para la aparición de insuficiencia cardíaca son el aumento de la fatiga, la pérdida de rendimiento, hinchazón en las piernas y tobillos, y la tos nocturna.
Por Cristina Cartier
El cardiólogo intervencionista Dr. Emanuel Luchessi (MN 11325) en diálogo con INS brinda detalles acerca de una enfermedad que es la primera causa de hospitalización en pacientes mayores de 65 años, por delante del cáncer y las enfermedades respiratorias.
¿Qué tan frecuente es la insuficiencia cardíaca?
“En una enfermedad que se ve todos los días. Cuatro de diez pacientes padecen IC. Sabemos que existen cardiopatías por estrés que generan IC, que a veces son transitorias, por lo cual decimos que el estrés juega un rol muy importante en la aparición de estas enfermedades”.
¿Por qué ocurre la IC?
“La IC es un cortejo sintomático que ocurre a causa de que el corazón empieza a fallar. Esto ocurre por diferentes cosas, puede haber alteraciones estructurales funcionales que generan alteraciones en las condiciones de carga de ese corazón, que termina fallando”.
¿Cuáles son los síntomas típicos?
“Lo más común es que la gente refiere que hace cualquier cosa y se agita, que no pueden dormir bien ya que les falta el aire por las noches, o se levantan a orinar mucho, cierta distención abdominal, hinchazón en las piernas, etc. Todos estos síntomas expresan una disfunción del corazón, el panorama depende si se trata de un paciente sano, donde la afección aparece de golpe (insuficiencia cardíaca de Novo) , o lo que es más común todavía, que se trate de un paciente que ya era un insuficiente crónico, que presenta reagudizaciones o descompensaciones, que son los pacientes que deben internarse una y otra vez. Se trata de una enfermedad progresiva, cada internación que requieren, acarrea mortalidad en un porcentaje muy alto. Hasta el 30% de los pacientes que se internan fallecen al año, por lo cual decimos que se trata de una patología grave”.
¿Por qué se produce la IC?
“Existen enfermedades genéticas, pero lo más común es la enfermedad coronaria. Es decir la enfermedad de las arterias del corazón que terminan causando daño en el músculo cardíaco, lo cual genera la IC. La consulta precoz es fundamental para detectar la patología“.
¿Se pueden vincular las taquicardias y palpitaciones?
“La taquicardia es el aumento de la frecuencia cardíaca, y las palpitaciones son un síntoma subjetivo, cuando la persona siente que el corazón anda muy rápido y como que va a estallar. Ambas están muy relacionadas con la IC, lo mismo que las arritmias. Sabemos que un corazón insuficiente predispone al desarrollo de arritmias, lo cual se trasforma en un círculo vicioso. Un corazón dañado e insuficiente tiene más riesgo de tener arritmias muchas de ellas muy graves”.
¿A qué edad aparecen generalmente las IC?
“En general en personas mayores de 60 años de edad. También existen pacientes jóvenes en las patologías más frecuentes, aparecen en patologías más raras y hasta niños con enfermedades congénitas, de hecho el trasplante existe en pacientes jóvenes”.
¿Se cura la IC?
“En general no se cura. Pero existen algunos tipos de IC que se pueden revertir, resolviendo las causas que la produjo. Las enfermedades valvulares que producen IC, una vez solucionado el problema de las válvulas, muchas veces mejoran, hasta incluso el paciente puede no tener más síntomas. La más común de todas es la estenosis aórtica, que también es una enfermedad de los adultos mayores, que sucede cuando la válvula aórtica se obstruye, y no deja pasar el flujo normal del corazón. Esta situación provoca la aparición de los famosos soplos. Es una enfermedad que se trata con cirugía convencional, inicialmente, y ya desde hace unos años, se trata con los cardiólogos intervencionistas, con un reemplazo de la válvula, utilizando catéteres. Es una intervención muy novedosa e interesante, que cuenta con veinte años de desarrollo, con lo cual está al alcance de todos”.
¿Cómo es la cirugía?
“Es de rápida recuperación, los pacientes enseguida muestran sus mejores condiciones. Esto es muy importante, ya que como se produce en enfermos añosos, no es lo mismo recuperarse de una cirugía a cielo abierto, a los 50 años, que a los 80. Si se puede ofrecer una recuperación más rápida, se cuenta con más beneficios para los adultos mayores”.
¿La cirugía es la única solución?
“No es la única opción. Todo depende de las causas que generen la IC. En general se trata de un tratamiento con pastillas. Se usa un abanico muy amplio de medicamentos, que inicialmente eran los diuréticos y con el tiempo esto ha ido cambiando, sumando muchos recursos que hacen que los pacientes clínicamente estén mucho mejor. La cirugía será a partir de la causa que motive la IC. Si existen enfermedades de las arterias, quizá sea necesario una angioplastia, o cirugía a de by pass. Si el problema es en las válvulas, se puede poner una válvula quirúrgica”.
¿El paciente se demora en consultar?
“Por lo general el paciente llega al consultorio porque siente agitación. Manifiestan que caminan dos cuadras y se agitan y eso les preocupa. Entonces se hacen estudios para llegar al diagnóstico de IC. En lo posible, se busca encontrar que fue lo que generó esa IC. Identificada la causa, el tratamiento especifico le traerá mayores beneficios a ese paciente”.
¿Cómo es el diagnóstico?
“Se realiza una evolución clínica, un electrocardiograma, y el primer estudio complementario que siempre se hace, la radiografía y el análisis de sangre, el ecocardiograma que nos brinda mucha información. Este estudio muestra cómo está la estructura cardíaca, si hay causa de válvulas, si el músculo se contrae normal, o hay un pedacito que se contrae menos, lo cual puede sugerir problemas de arterias, etc.”.
¿Qué sucede si además es un paciente fumador y con sobrepeso?
“Debemos discernir qué es lo que está generando la falta de aire, ya que las tres manifestaciones en sí mismas la provocan. La idea es que abandone el tabaquismo, con ayuda del neumonólogo para diagnosticar una posible enfermedad obstructiva crónica (epoc), para tratar con el cardiólogo”.