Con la presencia anticipada de la tradicional gripe y los coletazos de la pandemia a causa del coronavirus, las personas confunden síntomas y desconocen los protocolos que deben seguir.
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Si el resultado del hisopado es positivo o detectable, la persona tiene Covid-19 y debe cursarlo desde su casa”. La mayoría de los pacientes van a cursar la enfermedad en su casa, guardando reposo, y con tratamiento de los síntomas.

Los especialistas refieren que “La enfermedad empieza el día en que aparece el primer síntoma, y desde ahí se cuentan los días que se debe estar en aislamiento. Al tratarse de una enfermedad muy contagiosa, se sabe que el aislamiento consiste en 7 días desde la fecha de inicio de los síntomas, si el paciente tiene vacunación completa o 10 días, si no tiene esquema completo, o no recibió ninguna vacuna contra el Covid-19”.

Si está vacunado, el día número 8 desde la fecha de inicio, puede salir del aislamiento, con barbijo, manteniendo la distancia social y evitando reuniones con otras personas. Recién el día numero 11 desde la fecha del primer síntoma, la persona pude dejar las medidas de prevención, ya que en ese momento se estima que no contagia más, si es que no tuvo fiebre. Es decir que se puede contagiar el coronavirus hasta el día 10 inclusive, desde la fecha de inicio de los síntomas.

Cabe señalar que estar en aislamiento significa estar solo en una habitación, preferentemente usar baño distinto del resto de los convivientes, limpiar las superficies luego de su uso, y no salir del domicilio. Una vez transcurridos los 10 días de aislamiento y restricciones, se necesitan 7 días libres de síntomas o franca mejoría de los mismos. Si la persona se siente bien, sin dolor torácico, sin sensación de falta de aire, no tuvo desmayos, palpitaciones y no estuvo internado, puede volver a hacer actividad física en forma graduada.

Se estima que los síntomas Covid-19 agudo pueden durar hasta un mes, más allá de una vez superados el aislamiento y los días extra de cuidados especiales. Si pasadas las 4 semanas no existen síntomas persistentes, no estuvo internado, y en la enfermedad aguda no tuvo síntomas cardiacos de alarma (dolor de pecho, sensación de falta de aire, palpitaciones, o desmayo), probablemente no sea necesario hacer ningún control posterior. De lo contrario, “se debe consultar al médico, quién puede determinar si se requiere no hacer algún estudio complementario, todo relacionado a la situación clínica de la persona”.