El famoso dolor de pie, es la inflamación del tejido conectivo grueso que une el talón con los dedos del pie, lo cual suele ser motivo de queja de muchas personas. Se trata de una dolencia que no requiere análisis de laboratorio, salvo la revisión médica y estudios por imágenes para determinar su diagnostico.

El Dr. Enzo Sperone, médico traumatólogo, especialista en cirugía de pierna, tobillo y pie del IADT y el Centro especializado Talus, define el trastorno para INS: “El dolor de pies en general, y la fascitis plantar en particular, es uno de los cuadros dolorosos del pie que tiene más consultas médicas, que suele aparecer entre los 30 y 60 años. A veces aparece en personas que trabajan durante muchas horas paradas, realizan actividades deportivas, o por cuestiones traumáticas como quebraduras, etc. La Fascitis es  muy común, ya que se estima que una de cada diez personas la padecen. Se trata de un dolor en el talón del pie, aunque no es el único, ya que existen otros trastornos”.

¿Es un dolor que siempre aparece en el talón?

“Generalmente aparece en el talón. Es decir que se trata de la inflación de la estructura en toda la planta del pie, focalizándose en el talón, aunque a veces puede involucrar la porción media de la planta del pie. Es muy doloroso y molesto”.

¿Cuáles son las causas?

“La causa es desconocida, pero se la puede asociar a determinados factores como la obesidad, permanecer muchas horas de pie, trastornos del apoyo (pie plano o arco vencido, pie cabo, que es lo contrario), desbalances metabólicos y colesterol alto, como elementos participantes en la aparición de la Fascitis”.

¿El calzado de tacos puede determinar la Fascitis?

“En este tipo de trastorno no tiene una vinculación estrecha el hecho de usar tacones, aunque si calzados duros. La zona del talón tiene una estructura anatómica, que es la grasa de la planta del pie, que posee una conformación única, ya que se trata de una grasa que no existe en ninguna otra parte del cuerpo. Esa grasa sirve de acolchado, cuando la persona tiene disminuida esta grasa, lo cual hace que al usar un calzado duro demasiado rígido, puede aparecer este tipo de trastorno”.

¿El espolón calcáneo se relaciona con la Fascitis?

“Puede influir en la hinchazón del pie, pero no se relaciona con la Fascitis. El espolón calcáneo no tiene participación en el origen de un cuadro doloroso en sí, lo cual ha quedado en el colectivo general y es difícil erradicar esa creencia. El espolón es un cuadro limitado que cumple un ciclo. En algún momento de ese ciclo, que puede demandar varios meses, va fluctuando, ya que por momentos duele menos o más, hasta que el dolor desaparece. En estas situaciones la gente recurre a determinadas terapias alternativas que pueden resultar hasta contraproducentes”.

¿Cuáles por ejemplo?

“Por ejemplo las infiltraciones, lo cual es muy común hacer ante la presencia de dolor en el talón. Si no se hace criteriosamente puede traer complicaciones para el paciente”.

¿Cómo es el diagnóstico y qué se recomienda como tratamiento para la Fascitis?

“El diagnóstico es simple y se hace con una exploración física. Los estudios de imágenes, como radiografías, resonancias o ecografías, sirven para descartar otros trastornos o estudiar aquellos relacionados con el apoyo del pie. Siempre considerando el contexto general del paciente, se debe tratar la Fascitis con un tratamiento específico para el pie. Se puede decir que el paciente responde muy bien sin necesidad de una cirugía. Inicialmente se hace kinesiología, dentro de la misma, la modalidad que implique desinflamar y elongar la zona. La estructura inflamada sigue hacia arriba en la pierna, por los gemelos y el talón de Aquiles, ante lo cual consiguiendo un buen plan de estiramiento, se obtienen muy buenos resultados. Es importante complementar con atención de todo aquello que pueda influir como puede ser el sobrepeso y considerar el uso la talonera clásica, que se consigue en farmacias u ortopedias, ya que resulta muy útil amortiguando la zona afectada”.

¿Cuáles son los tratamientos más novedosos?

Se pueden implementar terapias con ondas de choque, que se están usando mucho y con buenos resultados. Es una derivación de la kinesiología, es un tanto molesta durante los minutos en que se realiza, se busca reagudizar este tipo de cuadros crónicos o largos, para mejorar  y curar la Fascitis .De las técnicas más modernas, son las terapias biológicas o regenerativas, son las infiltraciones con plasma y plaquetas. Es decir un preparado de la sangre del paciente, lo cual se hace de manera sencilla en el consultorio. Se extrae sangre, se pasa por un aparato que centrifuga, se obtiene la parte más concentrada de plaquetas, y luego se infiltra en la zona del talón. Este proceso consigue estimular la desinflamación deseada”.