Teletrabajo y salud: Nuevas enfermedades de la era digital y el alcance de la actividad física

El ejercicio promueve la salud física y mental de las personas. Se sabe que aumenta la masa mineral ósea (fósforo y calcio) y previene las enfermedades crónicas más conocidas (obesidad, diabetes, hipertensión, y otras). Favorece buenas posturas, reduce el estrés y estimula el sistema inmunológico. Esto último resulta relevante en tiempos de pandemia donde el teletrabajo ha modificado la rutina diaria, poniendo de manifiesto múltiples secuelas que preocupan especialmente.

_{Por Cristina Cartier}

“Las personas refieren fatiga visual, migrañas y dolores musculares consideradas actualmente como las nuevas enfermedades de la era digital. Se busca la actividad física como una salida efectiva para mejorar la calidad de vida ante la tensión excesiva, el nerviosismo y la ansiedad. Está comprobado que la actividad física ayuda considerablemente a personas que arrastran diferentes patologías. Es fundamental darle al cuerpo lo que realmente se merece, el tratamiento que corresponde y sobre todo disfrutar, ya que es una manera de poder mantener en el tiempo la actividad elegida”, dice el entrenador deportivo Jano Rivero al ser consulado acerca de los beneficios del movimiento“.

¿Qué se observa en las personas en el marco de la pandemia?

“Se nota claramente que las personas están muy afectadas,  con mucho nerviosismo y un estrés muy particular. Hay gente que te dice que se siente demasiado cansada y entonces pretende una rutina tranquila, y otros por lo contrario, necesitan descargar tensiones y piden una clase mucho más intensa. El profesional encargado de pautar la actividad debe ser consciente de las necesidades en este contexto especial. Hay que “encausar” la actividad para lograr el bienestar buscado por esa persona, que se sienta cómoda y no se lesione en ese proceso. La idea es lograr un buen entrenamiento y que regresen a casa reconfortados“.

¿Qué es lo que marca la diferencia en el contexto de pandemia?

“La situación ha ido fluctuando a lo largo de la pandemia. Se nota mucho nerviosismo por el aumento de casos de covid-19, y por las nuevas cepas más contagiosas. El joven que hace mucho deporte y convive con adultos mayores experimenta un temor constante al posible contagio, lo cuál se traduce en diferentes procesos de ansiedad“.

¿Las personas buscan espontáneamente hacer gimnasia o se acercan con una indicación profesional?

“Muchas personas acuden con una indicación médica en mano. Depende de cual sea el diagnóstico es lo que se busca, ya sea a corto, mediano o largo plazo. Es muy bueno que la gente intenten soluciones a sus problemas, muchos recurren al psicólogo quién los guía siempre hacia la práctica deportiva. Hay demasiada carga emotiva, por lo cuál se busca una actividad placentera y sentirse cada vez mejor“.

¿Qué importancia tiene la comunicación con el alumno?

“En las primeras entrevistas para definir un plan, se aprovecha para sugerir diferentes posibilidades. Algunos prefieren el aire libre donde el abanico de posibilidades es muy amplio. Salir a correr es algo sencillo y resulta una interesante estrategia para despejar la mente y sentirse activo. Siempre hay que ser responsable, considerando las patologías de base de la persona y la inquietud de hacer algo que le quite el malestar. La buena comunicación entre alumno y profesor es fundamental, para asegurar un cuerpo sano, con una vida ordenada respecto a la alimentación y el descanso. Cuando se trabaja en grupo, aparecen valiosas herramientas porque el individuo conoce gente, se siente contenido y potencia sus rendimientos por efecto contagio“.

¿El teletrabajo repercute con determinadas consecuencias físicas?

“Las personas refieren todo tipo de síntomas: problemas de visión y dolor de cabeza por el uso excesivo de las pantallas, molestias en las articulaciones de manos y dedos por estar horas frente a un teclado, y las contracturas a causa de malas posturas, sumado a cuestiones emocionales que se relacionan con permanecer sin contacto con los demás“.

¿Cuáles son las mejores estrategias para aliviar las molestias?

“La kinefilaxia es una disciplina muy certera para conllevar distintos problemas, hay que implementar movimientos para que no se desarrollen enfermedades o lesiones, con tratamientos de recuperación, con trabajos de flexibilidad y respiración. Hacemos hincapié en las elongaciones porque la vida de un atleta depende de su capacidad de elongar. Para el público común se refieren grandes beneficios también al hacerlo luego de la actividad física. El cuerpo necesita descontracturar esa sobrecarga que se impone durante el ejercicio, evitando así el estrés muscular“.

En estas nuevas experiencias laborales desde casa, se dice que la silla es el enemigo moderno y silencioso. ¿Qué se recomienda hacer en medio de dicho sedentarismo?

“Hay que saber darle curso al lenguaje corporal, ponerse de pie cada tanto, mover cuello y hombros. Hacer pequeñas pausas en el trabajo resulta como pequeños masajitos que le hacemos a nuestros músculos“.

El aumento de peso ha resultado un coletazo de la situación de pandemia. ¿Perdió prioridad el objetivo de descenso de peso ante otros factores que han surgido?

“Quiénes siempre han hecho deporte siguen en la misma línea de tratar de estar bien y no pierden el rumbo aún en la crisis que vivimos. Pero existen otras personas que se conforman con cumplir y encuentran en la actividad física una especie de cable a tierra. El año pasado las personas estuvimos mucho tiempo encerrados y con pocas posibilidades de hacer gimnasia, incluso se incorporaron hábitos poco saludables, ya que muchos se dedicaron a preparar comida casera en exceso como pasatiempo. Nunca es tarde para empezar de nuevo con los objetivos de vida, hay que orientar el rumbo, desarrollar la disciplina y disfrutar hasta conseguir la silueta deseada“.

¿Cómo son los protocolos en ámbitos deportivos? ¿Se cumplen correctamente?

“Se pueden cumplir muy bien aún en lugares cerrados, lo importante es mantenerse en una línea responsable. Tanto los referentes de gimnasios como el público, debemos ser conscientes de los riesgos que se corren. Cuando trabajamos con elementos, colchonetas y mancuernas, por ejemplo, hay que ser muy higiénicos y cuidadosos, y evitar compartir esos materiales respetando las pautas preventivas. En espacios al aire libre siempre es más fácil cumplir con los protocolos pero igualmente hay que considerar reunir alumnos en grupos reducidos marcando la distancia física que nos piden. Queremos seguir adelante en la práctica deportiva para beneficio de cuerpo y mente“.